Para convertirte en entrenador personal debes estudiar y prepararte para ello. No se trata solo de ir al gimnasio, levantar pesas y correr. Debes estar capacitado para asesorar a otros sobre el ejercicio físico y la salud en general. Aquí te explicamos los pasos a seguir:

1. Estudia una carrera
Para ser entrenador personal debes estudiar una carrera en ciencias del deporte, educación física o nutrición. En estos estudios se te enseñarán las bases sobre el funcionamiento del cuerpo humano, la biomecánica del ejercicio, la fisiología del deporte y la nutrición deportiva.

2. Obtén la certificación
Una vez que hayas terminado la carrera, deberás obtener la certificación de entrenador personal. Esta la otorga la Federación Internacional de Educación Física y la Asociación Nacional de Educación Física. Para ello, debes superar un examen teórico y práctico.

3. Especialízate
Puedes especializarte en una disciplina deportiva en concreto o en un tipo de entrenamiento, como el entrenamiento funcional, el entrenamiento con pesas o el entrenamiento cardiovascular. De esta forma, podrás ofrecer a tus clientes un servicio más completo y adaptado a sus necesidades.

4. Ten en cuenta otros factores
Además de los aspectos técnicos, debes tener en cuenta otros factores para convertirte en un buen entrenador personal. Debes ser una persona motivadora, con capacidad de liderazgo y empatía. También es importante que seas perseverante y que te guste el trabajo en equipo.

Sigue estos pasos y conviértete en el entrenador personal que todos quieren tener.

¿Qué puedo estudiar si me gusta el gym?

Si te gusta el gimnasio y quieres dedicarte profesionalmente a ello, existen varias opciones de estudio. Puedes optar por un título universitario, cursos de formación o certificaciones. Una carrera universitaria relacionada con el gimnasio y el deporte en general es la Licenciatura en Ciencias del Deporte. Se trata de una carrera de cuatro años en la que se estudian aspectos fisiológicos, psicológicos y sociológicos del deporte. Otra opción de estudio universitario es la Licenciatura en Educación Física. Se trata de una carrera de cuatro años en la que se estudian temas relacionados con la educación, la actividad física y el deporte. Para acceder a estas carreras universitarias es necesario superar una prueba de acceso específica y cumplir unos requisitos mínimos de notas. Otra opción de formación es realizar un curso específico relacionado con el gimnasio o el deporte. Hay cursos de entrenador personal, preparador físico, masajista deportivo, etc. Para acceder a estos cursos suelen ser necesarios tener un nivel medio o superior de educación y superar una prueba de acceso. También existen certificaciones que te permiten trabajar en el gimnasio sin necesidad de estudiar una carrera universitaria o realizar un curso específico. Para obtener una certificación suelen ser necesarios tener un nivel medio o superior de educación y superar una prueba de acceso. En cualquier caso, es importante informarse bien sobre las diferentes opciones de estudio antes de decidirse por una en concreto.

¿Qué es lo primero que hace un entrenador?

Para muchos, el trabajo de un entrenador consiste en dirigir y motivar a un equipo para que logre sus objetivos. Sin embargo, esto es solo una parte del trabajo de un entrenador. De hecho, la mayoría de los entrenadores pasan la mayor parte de su tiempo en actividades que no tienen nada que ver con el fútbol, el baloncesto o el voleibol. Aquí hay algunas de las cosas que hace un entrenador:

• Planificar. Un entrenador dedica mucho tiempo a planificar el programa de entrenamiento de su equipo. También debe planificar las estrategias de juego y de táctica que se utilizarán en los partidos. Además, el entrenador debe planificar el calendario de entrenamientos y partidos del equipo.
• Organizar. Un entrenador dedica mucho tiempo a organizar el equipo. Esto incluye la elección de los jugadores para los partidos, la asignación de tareas a los entrenadores auxiliares y el control del equipo durante los entrenamientos y los partidos.
• Comunicar. Un entrenador dedica mucho tiempo a comunicarse con los jugadores, los padres y los medios de comunicación. Los entrenadores deben asegurarse de que los jugadores entiendan las expectativas y los objetivos del equipo. También deben asegurarse de que los padres estén al tanto de lo que sucede con el equipo. Los entrenadores también deben comunicarse con los medios de comunicación para dar a conocer el rendimiento del equipo.
• Evaluar. Un entrenador dedica mucho tiempo a evaluar el rendimiento de los jugadores. Deben analizar qué jugadores están jugando bien y qué jugadores necesitan mejorar. También deben evaluar el rendimiento del equipo en general y buscar áreas en las que el equipo pueda mejorar.

Como puede ver, ser entrenador es mucho más que gritar órdenes desde la sidelines. Los entrenadores dedican gran parte de su tiempo a actividades que no tienen nada que ver con el fútbol, el baloncesto o el voleibol. Sin embargo, todas estas actividades son necesarias para el éxito de un equipo.

¿Cómo ser entrenador personal certificado?

Entrenar a otros para que alcancen sus objetivos físicos es una profesión muy gratificante. Pero antes de comenzar a cobrar por tus servicios, es necesario obtener la certificación adecuada. Aquí te diremos cómo ser entrenador personal certificado. 1. Busca un programa de entrenador personal acreditado. Asegúrate de que el programa cumpla con los requisitos del Consejo Nacional para la Acreditación de Educación en Terapia Física y del Consejo Americano de Educación Física y Deportes. 2. Elige el nivel de certificación. Hay tres niveles de certificación para entrenadores personales: certificado de nivel 1, certificado de nivel 2 y certificado de nivel 3. El nivel 1 es el más básico y el nivel 3 es el más avanzado. 3. Completa el programa de entrenamiento. El programa de entrenamiento puede durar de unos pocos meses a un año, y deberás completar un examen para obtener tu certificación. 4. Renueva tu certificación. La mayoría de las certificaciones de entrenador personal caducan después de unos años, por lo que es necesario renovarlas para mantenerse al día.